La Promesa ha vuelto un día más a la pequeña pantalla con un episodio de lo más emocionante. En la última entrega de la serie de La 1 de Televisión Española, se toman medidas para proteger a Pía tras el asalto de Gregorio, asignándole dos guardias para su seguridad. Sin embargo, esto no logra calmar a una aterrada Pía, cuyos compañeros empiezan a temer que su pesimismo oculte algo más grave. Mientras tanto, Santos cruza todas las líneas rojas con Vera, intentando abusar sexualmente de ella. Afortunadamente, el señor Pellicer llega a tiempo para impedirlo.
Por otro lado, Simona regresa a La Promesa más feliz que de costumbre, habiendo conocido a su nieto gracias a Virtudes. Mientras, María Fernández sigue trabajando en su libro en secreto, pero Petra la descubre, obligándola a mostrarle el contenido y castigándola severamente. En paralelo, el capítulo del lunes reveló que Manuel y Curro han aparecido en la guerra, enfrentando la dura vida en las trincheras, muy diferente a la del palacio. Manuel se da cuenta de que la estrategia en combate es errónea, pero es demasiado tarde cuando descubre que Curro va directo a un peligro mortal.
Avance del capítulo 370
En el próximo capítulo de La Promesa, Jana confirma la peor de las noticias respecto a Pía, y lo sucedido se extiende discretamente por el palacio. A pesar de su gran tristeza, el servicio no tiene más remedio que acatar las órdenes del marqués de Luján para evitar que los rumores se propaguen. Mientras tanto, Margarita y Ayala se las prometían muy felices, pero Martina arremete contra Ayala delante de todo el mundo, llevando la situación a un extremo intolerable.
Por otro lado, la relación entre Adriano y Catalina avanza emocionalmente. María Fernández está muy afectada porque Petra ha destruido sus notas para el libro, y Lope sufre una brutal paliza. Virtudes se enfrenta a su madre al descubrir que está visitando a su hijo. En medio de este caos, María Antonia, que cuida de Cruz, desarrolla un interés por Alonso que la llevará a cruzar una línea sagrada. En un momento de intensa emoción, María Antonia y Alonso se besan, desatando una cadena de consecuencias que pondrá en peligro las ya frágiles relaciones en La Promesa.
